Mazalán Comunicaciones

10 notas mentales que tomé durante 10 años de trabajo en Mazalán Comunicaciones. Mentira, son más de diez las notas en mi Keep. Pero vamos a resumirlas para hacer más atractiva esta publicación. 1. Todos sufrimos el síndrome del impostor en reiterados momentos de nuestra carrera profesional. Y este post no fue la excepción: ¿realmente tengo algo de valor para aportar a esta comunidad? Pero hay que seguir igual, hacer las cosas incluso con miedito y aprender en el camino con humildad. Siempre todos, tenemos alguito para aportar. 2. El crecimiento siempre es en -y gracias al- equipo. Construir un buen team lleva tiempo, energía, corazón y paciencia y todo eso, ¡vale la pena! Lo más importante es rodearnos de buenas personas. Todo lo técnico, se aprende. Pero los buenos valores, la actitud positiva y el hambre de crecer, vienen de fábrica. 3. La flexibilidad no es solo una habilidad, tiene que ser cuasi una filosofía de vida. Entré a Mazalán llena de estructuras, pero aprendí que lo constante es el cambio y que hay que surfear las olas, bancarse en muchas ocasiones la incertidumbre y transformarse todo el tiempo. 4. La confianza del cliente no se gana en un pitch. Es una construcción a largo plazo. Vale la pena invertir tiempo en esas relaciones y escucharlos con total apertura. 5. El es combustible. Hay que naturalizarlo, pedirlo todo el tiempo y aprender a darlo de forma asertiva. 6. Escribir los objetivos, motiva. A nivel personal, laboral o como trabajo de equipo: marcar el Norte es un impulso para avanzar con convencimiento y determinación. 7. Ante un problema, la catarsis sirve por un rato. A partir de ahí, el valor está en la búsqueda de soluciones y en la proactividad para cambiar lo que está a nuestro alcance. 8. La autocrítica te sirve. El exceso de autocrítica, te paraliza. Todo el tiempo se trata de encontrar el equilibrio. ¡Qué lindo suena escrito, qué difícil ponerlo en práctica! 9. Nota mental diaria y pegada en el escritorio: Erika, ¡respirá! Si no te cuidás vos, no te cuida nadie. Almorzá a horario, salí a caminar, despejá la mente. A nadie le sirve una persona quemada. La energía y la alegría, se cuidan y se alimentan. 10. Hay que celebrar lo bueno. ¡Qué facilidad tenemos para ver las faltas y los errores y cuánto nos cuesta celebrar los logros diarios! Necesitamos la palmadita diaria, pero también vale la pena frenar y hacer un análisis del último tiempo. ¿Trimestre, año, década? Gracias Gabriela Bordón, Gisela Reche, Paola Méndez, Renata Villar Gagliardi, Silvia Gambarte y Tatiana Tuozzo por este lindo equipo que formamos. Fernando Arocena, Carlos Mazalán y Maria Cardoso por la confianza inicial y la de estos años. Laura Agozino y Rocío Rodríguez Valsagna por ser soporte emocional ¡Gracias a todo el team de Mazalán (los que están y los que pasaron por acá) por construir este hermoso lugar para trabajar!